El hombre en una encrucijada, Palacio de Bellas Artes, México, 1935 - Mural de Diego Rivera
Diego Rivera había recibido el encargo de pintar un mural en el Rockefeller Center, el que comenzó en marzo de 1933. El nombre elegido por los arquitectos de este complejo fue Hombre en Encrucijada mirando con Esperanza y Gran Expectativa la Elección de un Futuro Nuevo y Mejor. Si bien los bocetos fueron aprobados por el comité del edificio, la inclusión de una imagen de Lenin, en el centro del mural llevó a que el mismo sea destruido. Al regrear a Mëxico, Rivera lo vuelve a pintar en el Palacio de Bellas Artes.
..."La vanguardia tal como se entiende en nuestra época tiene, particularidades que la hacen diferente de otras formas artísticas por más renovadoras que éstas sean. Es cierto que todo gran artista necesita formas nuevas para poder expresar ideas singulares; son originales per se, sin proponérselo, y la novedad formal se da por añadidura. La vanguardia, en cambio, busca deliberadamente la originalidad por la originalidad misma, se propone apriorística, deliberadamente, hacer algo novedoso, inédito, inusitado, nunca visto; es lo nuevo por lo nuevo mismo. Cultiva la forma por sí misma indiferente al contenido, su problema no es el qué sino el cómo, y tampoco le interesa demasiado la calidad, sólo importa que sea una novedad"...
Leer texto completo: Sebreli - "El fin de la vanguardia". En Las aventuras de la vanguardia: El arte moderno contra la modernidad
